Niñez Delincuente

Por: Eduardo García Anguiano

     Preocupados por las grandes notas rojas de los medios de comunicación, hemos olvidado a la niñez delincuente.

     Mientras los titulares de prensa reproducen los temas de la Narvarte y la libertad de prensa, El Altiplano y lo portentoso del escape, Tepepan y los videos de la tercera edad o la CNTE y sus presuntos delincuentes electorales, ocurren algunos delitos que al parecer no merecen mucha atención de la opinión pública porque los cometen menores de edad:

• Una niña de 11 años asesinó a dos de sus hermanos de sólo 9 meses y de 3 años de edad, por supuestas órdenes del diablo, en hechos ocurridos en Ciudad Madero, Tamaulipas. La niña Fernanda confesó que: “ella privó de la vida a sus dos hermanitos, pues voces se lo ordenaban”; narró que a ambos los asfixió, a la más pequeña le tapó la boca y la nariz, mientras que al de 3 años lo ahogó con una almohada. 

• Policías del DF lograron el aseguramiento de dos niños de 9 y 11 años, así como de una niña de 13 años, quienes portaban una pistola de juguete y dos navajas con las que amedrentaban a sus víctimas. Los menores infractores asaltaron a una persona de 22 años, a quien le quitaron un teléfono iPhone 6 y 500 pesos en efectivo. 

• Estos hechos delictivos se suman al caso del niño sicario en Morelos y el de otro joven de 15 años, que trabajaba en la misma célula del “Ponchis", quien afirmó que tras el secuestro de su hermana, se vio forzado a trabajar para el Cártel del Pacífico. http://eleconomista.com.mx/seguridad-publica/2011/01/27/cae-otro-nino-sicario-morelos

     Ante esta situación cabe preguntarse: ¿es responsabilidad exclusiva de los familiares el comportamiento delictivo del menor?, ¿qué sucede con los menores delincuentes que no tiene padres o tutores?, ¿es momento de dar prioridad a una responsabilidad pública especializada en la prevención de la niñez delincuente?

     Pasemos de la estadística a la toma de conciencia colectiva, como primer paso para atender esa descomposición social que ha llegado a la niñez mexicana, porque aunque los culpables puedan ser ellos, la responsabilidad está en los adultos.

     Un dicho anónimo dice: “Lo que pongas en los primeros años de tu vida quedará en ella hasta más allá de la muerte”.

@EGAnguiano