La Ola Verde
Por: Crim. Roberto Jurado Palomares
Y por temprano que te levantes a donde quiera que
tú vayas, ya está lleno de pendejos,
y son peligrosos porque al ser mayoría eligen hasta
al Presidente....!!!!
Facundo Cabral
Retomando un poco
la propuesta del artículo anterior ahora mencionaremos que para nuestra
desgracia han sido ya aprobadas las legislaciones del Partido Verde respecto a
la protección animal; pero el problema no para sino por el contrario sigue
vigente y en crecimiento; es una idea que al parecer tan irracional es seguida;
votada y por mayoría aprobada.
¿Que es lo que les pasa a nuestros gobernantes o a nosotros al elegirlos?,¿Será que más bien la culpa la tenemos nosotros que nos adaptamos a un político que sigue vendiendo publicidad en lugar de oportunidades laborales, de aquel político que regala algo y que con eso compra votos?; pero esto, ¿Ya nos había pasado o es nuevo?; bueno la verdad es que pasa de manera tan cotidiana y tan poca atención ponemos que sigue y seguirá pasando.
¿Donde queda nuestro aprendizaje o hacia a donde dirigiremos nuestras Políticas Públicas?; si nos damos cuenta hemos abandonado nuestro país y a las cosas que a este benefician, enviciados en proyectos superficiales. Solo presumimos de ser mexicanos pero en el momento de asumirlo nos hacemos a un lado y continuamos con aquellas cosas que no afectan mi estado de confort; nos unimos y nos indignamos en las redes sociales pero de manera virtual solamente no nos movemos.
Por qué hago estas observaciones porque solo nosotros podemos modificar la forma en la que estamos gobernados con nuestros actos no solo con nuestras palabras o con Like´s, resulta irrisorio todo tipo de movimientos a los cuales nos sumamos pero no accionamos.
Ahora bien que pasa con los partidos políticos, que sigue pasando que nos convence o como es que manipula nuestras necesidades; necesidades históricas; ya que siguen siendo las mismas tal vez por eso siguen siendo tan redituables que creemos en el ensueño de la niña pobre que se casa con el millonario; o la historia del señor con un gran corazón que ayuda al discapacitado; o de aquel buen empresario que comparte las utilidades y busca formas de redituar a sus empleados para que no se vayan.
Tomas Moro como un
buen ejemplo de consejero de gobierno y de políticas públicas, hablo ya de un
sitio sin espacio inlograble, difícil de subsistir pero lo curioso en esta obra
literaria es que lugares para plantear una política perfecta existen y muchos
el problema; siguen siendo sus gobernantes.
crime_investigatio@live.com.mx
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